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Marató Barcelona (según Agüita)


Vamos a ver si consigo ser breve, aunque la experiencia y las sensaciones son muchas.
Comienza mi relato con el sonido del despertador a las 06:00 AM, tras unos minutos de pereza, me levanto de la cama y comienzo con el ritual: primero desayuno, 2 barritas de isostar, plátano y medio, medio litro de aquarius y algo de agua; no tenia muchas ganas de comer nada, pero había que cargar las baterías; aseo personal, visita al baño por 2 veces (era necesario ir “ligerito”); mientras la familia se iba preparando, unos estiramientos y la correspondiente vaselina entre los dedos de los pies. A las 7:40 bajo al hall del hotel donde había quedado con Mincha y Canido; unas fotos para el recuerdo antes de partir para la línea de salida; por el camino nos encontramos con la representación de los Taninos, mas fotos, unas risas para soltar adrenalina y a buscar nuestro lugar en la línea de salida, nos despedimos de Canido, ya que Mincha y yo íbamos con dorsal azul y Canido amarillo.

Calentamos, trotando por dentro de nuestra zona e salida, aprovechamos para ver los últimos preparativos de la elite femenina, dispuesta en una tienda hinchable.
Dan la salida y vamos caminando los primeros metros mientras buscamos no pisar a nadie y un hueco por donde empezar a correr, nos adelanta mucha gente, algunos por la acera, parece que se están disputando el sprint final; poco a poco vamos marcando un ritmo muy cómodo, tanto que me gustaría ir mas rápido, gracias a Mincha me freno y no me dejo llevar por la euforia que produce ver a tanta gente animando. Al pasar de nuevo por la plaza de España, entre el Km. 11 y el 12, hay una marea de gente impresionante y entre esa marea diviso a Pili que me anima, las piernas se van solas y de nuevo me vuelvo a frenar, aunque pasados un par de kilómetros mas, decido lanzarme, le deseo suerte a Mincha y voy marcando un ritmo de 4:50 a 4:40; me voy hidratando en cada puesto e incluso me llevo la botella de Powerade durante un rato para poder ir tomando pequeños sorbos; voy controlando el ritmo y disfrutando del ambiente, que durante todo el recorrido, en unos sitios mas que en otros, no para de animar. Después de pasar la media maratón me cruzo con Canido, le animo y le veo muy entero; siento molestias en el pie izquierdo, creo que es por una arruga del calcetín, trato de no hacerle caso; al final no era el calcetín, pero una uña quedo bastante perjudicada; llegado el Km. 25 busco, entre el publico, a la familia, pero no los encuentro; comenzamos a subir la Diagonal, me acuerdo de la familia y los compañeros del CARMA, me emociono durante un momento con ese pensamiento, al girar delante de la torre Agbar, la cual tengo que reconocer que ni vi,¡¡ había tal multitud de gente animando !!, pase por un estrecho pasillo, sintiendo el aliento de la gente: IMPRESIONANTE.

El Trigal

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Continuo, ya en busca del Km 30 y al fin diviso a la familia, busco un lugar próximo a la acera, estiro la mano para saludarlos y continuo en busca de la meta, me encuentro bien y animado. Poco antes del Km 36 paso por debajo del Arco de Triunfo, otro lugar en el que la gente se agolpa dando ánimos, aunque aquí hay unas vallas colocada, que impiden que la gente se aproxime mucho; desde hace bastante tiempo vengo calculando que puedo andar sobre las 3 horas 22; bajamos las ramblas y giramos delante de la estatua de Colon, ya solo quedan 3Km, subimos por el paralelo y aquí el ritmo baja un poco, pero me digo que nada me va a parar, trato de no subir por encima de 5 y en cuanto veo el crono y veo que lo sobrepaso, vuelvo a apurar el ritmo; ya se distingue la plaza de España al fondo, estoy llegando y subo el ritmo, hay que entrar en meta con fuerza; esprinto, pero me equivoco pensando que ya estaba en meta, aflojo un poco, para recupera y volver a la carga al llegar al 42, levanto los brazos al cruzar la meta sintiéndome feliz, me cuelgan la medalla y me dan ganas de abrazar a la chica que amablemente me felicita, sigo recogiendo el avituallamiento y me busco un sitio para estirar un poco, me siento en el suelo agacho la cabeza, y de nuevo me emociono, no me lo acabo de creer, he hecho un tiempo que no creía poder hacer; me levanto y camino un poco para soltar las piernas, oigo a Pili y Yoli que me llaman detrás de las vallas, Pili me da un beso por entre la valla, me pasa ropa de abrigo para Mincha y para mi, busco a Mincha entre la multitud, pero no lo encuentro, resulta que estaba ya en el hotel; hacia allí nos dirigimos, nos damos un gran abrazo, unas fotos para el recuerdo y a celebrarlo todos juntos, incluido Canido y su padre, en un restaurante próximo a la plaza de Cataluña.

Agradecimientos: por supuesto a Pili por todo y mucho mas, a Andrea por la ilusión, a Gerardo y Yolanda por estar siempre ahí dando ánimos, al compañero Mincha por ser gran compañero y amigo; y por supuesto a todos los compañeros del CARMA por los ánimos, las llamadas y la compañía en los rodajes.